MECÁNICA VEGETAL
El árbol debe de tener un teorema
con el que calcula
cómo bombear la savia
arriba en verano, abajo en invierno.
Uno se imagina al árbol preparándose
para iniciar la migración,
la urgencia del repliegue hacia las raíces,
el alivio de la vuelta a las alturas.
Todo el mundo piensa
que los árboles no tienen prisa,
que son la materia inmóvil personificada,
pero la verdad es que crecen,
como niños recién nacidos,
a fuerza de viajes internos
cada vez más largos.
El árbol se mueve más que nadie
pero no pierde el tiempo
cambiando de lugar,
tiene entre sus anillos
todos los caminos del mundo.
Por eso es que el peor destino para un árbol
es que lo conviertan en barco
y lo lancen a puertos que no necesita
y el mejor, que lo usen para un columpio,
que es como él, todo movimiento
fijo en el mismo punto.
El árbol debe de tener un teorema
que realmente demuestra
la inmortalidad del alma.
Luis Arturo Guichard
Versión aérea
Luces de Gálibo
No hay comentarios:
Publicar un comentario