Muros
(1)
El cultivo forzado del índigo fue el principio del trabajo de Gandhi contra el
raj. En aquellos días que después vinieron se trazó la línea ratclif y a un
lado y a otro murieron 500 mil. Los británicos decidieron dibujar una línea
solo sobre un mapa. Aquí por ejemplo.
(2)
Al caer un muro quedarían ciertas marcas en el suelo, algún ladrillo loseta
mosaico piedra para juntar los pies sonreír hacia la cámara (esperar el disparo),
cuando todo hubiera ya pasado.
El
papel de los mapas amarillea.
Al
levantar un muro hasta lo más alto posible: mejor añadir zona de exclusión
tierra de nadie vacío cintas de mariposas metálicas en el lado del muro que
corresponda al afuera del muro. Decir siempre ahí afuera, no aquí no.
(3)
Desde la base a su parte superior el muro se inclina ciertos grados se comba
igual a la ola para que no se cabalgue.
Aunque
siempre o a veces alguien consiga trepar alzarse alguien consiga surfear,
quizás, siguiendo las recomendaciones del viejo Ferlinghetti y con mucho sudor
y demasiado el miedo.
Siempre
y tanto demasiado. Pero se alzan, sí.
(4)
El mapa envejece con el papel. El color de las marcas y de las rayas se
amarrona.
Las
líneas de la frontera nunca serían pintadas de añil aunque igual mutan. Se
torna grisura. Igual.
Nadie
recuerda el nombre del asesino de Gandhi y siempre se cruzan fronteras.
Ernesto
Suárez
La
habitación china
Ediciones
Liliputienses
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