miércoles, 3 de septiembre de 2025

CUATRO POEMAS DE PEOR QUE PEDIR DE ANTONIO MÉNDEZ RUBIO

 






EL ÚLTIMO REGALO



TEN.

Es la niebla de la que no se ve

por si tuvieras que decir algo,

visto que aún no atardece,

sobre el jilguero

caído pero con el oído

más puesto que nunca hasta ahora

en el azar. Sabes que con sentir

alzarse su abstracción, y tú con ella,


me vale.



―――――――――――



¿A QUE SÍ?



PARA soñar primero ha de haber alguien

que esté cerca un momento de la cama.

Que no haga falta que se despida. Después

oír también por aquí un mismo corazón

sin causa. Deber así obediencia a un mismo azar

desprovisto de ti. Ver el regalo.

Esperar el saludo de algún árbol posible.

Cada cuerpo es un mundo, se dijo,

lo único es que su nombre es un secreto.



―――――――――――



DE GUARDIA



OLÍA a azar, a barro tan absurdo

que lo de menos es reconocerlo.

La carretera no se terminaba

aunque no condujeras.

Que cayera

la madrugada entera era un detalle

que luego, si es que todo pasaba,

los demás agradecerían. Viste esa forma

de sombra, parecida a silueta,

hablarte en lengua de alegoría.

Que no se acercara nadie.

Que aún podía ser peor.



―――――――――――



DE PRONTO



QUEDA solamente una vela. Para dar gracias

a nadie por el miedo

a asumir que esas manos, apenas vistas

pasar de largo, no son un cuenco… para seguir

una huella así de mínima es

lo único que sucedería

sin perder

conscientemente la salud.

A tientas viene hasta justo al puerta.

La ventisca parece pedir más.




Antonio Méndez Rubio

Peor que pedir


Editorial Pre-textos


No hay comentarios:

Publicar un comentario