miércoles, 8 de enero de 2025

PIRÓFITAS DE CRISTINA RIVERA GARZA EN TRENZAR





 

 

 

 

PIRÓFITAS

 

 

 

El fuego no es un cuchillo. El fuego abrió

la fronda del Amazonas. Los eucaliptos

de Australia le deben su lugar

en la tierra al fuego. Reacomoda

reduce el radio

del alimento.

 

Nosotras desbrozamos el terreno

y urgimos a la hierba, las semillas, los matorrales

urgimos a las bayas, las frutas

urgimos a las nueces. El fuego sacó

a los animales salvajes de su camino

expuso así las madrigueras

escondidas, los hongos que atrajeron

a los herbívoros. Nosotras desplegamos

el fuego para esculpir el paisaje:

vengan alces, venados, castores, vengan

liebres, puercoespines, urogallos

vengan guajolotes, codornices

vengan.

 

Es cierto que usamos el fuego para arrear a los animales hacia

[los precipicios

y a los elefantes hacia las ciénagas donde, ya inmovilizados,

los matamos.

 

Con el tiempo, construimos un nicho.

Distribuimos los recursos naturales a nuestro gusto: más

[abundantes

más predecibles, más a la mano. Este mosaico de

[biodiversidad

es nuestro. Esta seguridad

física.

 

Mucho antes de que tu especie apareciera sobre la tierra, el fuego

nos dio calor y luz. Nos dio alces y nueces.

Nos dio hierbas y frutas, venados y codornices.

Nos dio un hogar.

 

La prueba definitiva de la domesticación dice

que no podemos propagarnos por nosotros mismas

sin la ayuda del fuego.

 

 

 

Cristina Rivera Garza

 

En

Trenzar

Santas, raras y mestizas

 

Lina Meruane

Cristina Rivera Garza

Cabriela Wiener

 

CCCB Breus

martes, 7 de enero de 2025

UN POEMA DE ANDREA LÓPEZ KOSAK

 



 

 

 

Éramos pocos

y entre nosotros

el viento cerró las puertas

no había

rencores que guardar

distancias

hasta que

papá quiso reinar y dividió

el día de la noche

los tallos de las venas

abiertas las bocas exhalaban sus vapores

más pesado que el aire

descendimos

del árbol contando hojas en blanco

no

dijo mamá

voy a

y descansó

y pasó el tiempo

y pasó

la corriente de una habitación a otra

 

 

 

Andrea López Kosak

 

Aula literaria de la Laboral