sábado, 30 de noviembre de 2024

SÍ SORPRESA DE DAVID EFE EN MANIFIESTO CONTRA ACTUAL

 



 

 

SÍ, SORPRESA

 

 

estas demasiado ocupado

en la creación

de     ángeles

imbéciles

 

 

*

 

 

parece

que todo sucede bajo el hielo

de ciudades detenidas

paralizadas

 

 

*

 

 

así la vida 

 

 

*

 

 

la cabeza es una celda abierta

para la sorpresa.

 

 

 

david efe

Manifiesto contra actual

 

1ER PREMIO POETODOS DE POESÍA

 

Zoográfico


viernes, 29 de noviembre de 2024

SUEÑO Y DÍA EN EL QUE SUENAN LAS CAMPANADAS DE CHIKA SAGAWA EN INSECTOS

 



 

 

 

Sueño

 

 

 

La realidad desintegrándose solo dentro de la luz desnuda del mediodía. Todos los fresnos son blancos huesos. Dando la espalda a la ventana transparente ella no sabe explicar. Solamente su anillo repite sus reflejos varias veces. Una espléndida vidriera. El tiempo vanidoso. Elegirán una calle bulliciosa al desviarse de la casa. Una hoja oscura y sudorosa. Sobre ella el viento está paralizado y no puede moverse. Rechazando la ilusión de las tinieblas, me entero. La gente es infiel. Fuera el aire salado eleva el alma.

 

 

―――――――――――

 

 

Día en el que suenan las campanadas

 

 

 

Todo el día

escucho las hojas caídas gemir tras ser pisadas

como si fuera así la tarde de la vida

anuncia la hora que ya se ha ido

como cuando las campanadas

trozo a trozo

raspan la carne de los árboles

porque ahí ya no existe el tiempo




Chika Sagawa

Insectos

 

Traducción Tamiko Nakamura

 

Ediciones Torremozas


jueves, 28 de noviembre de 2024

BACANTE UN POEMA DE ALICIA PÁRRAGA EN KAIRÓS

 




 

 

 

BACANTE

 

 

«¡Haz que sigan girando las canciones!

Un, dos, tres. Un, dos, tres. Sigue bailando»

 

Katy Parra

 

 

 

Comienzo a levitar

al reconocer los primeros acordes.

El estribillo me sopla en la cara y

mi cuerpo vuela,

se funde con la música,

se deslumbra en la inmensidad,

como el diente de león

madurado al sol

que concede

su último baile

al viento.

 

 

 

Alicia Párraga

Kairós

 

Prólogo de María Marín

 

Boria ediciones


miércoles, 27 de noviembre de 2024

LA CASA EN TORNO UN POEMA DE MAITE MARTÍ VALLEJO EN LA VIDA COTIDIANA ARRASA EUROPA

 



 

 

 

LA CASA EN TORNO

 

 

 

Sé que lleva en el bolsillo las llaves. Cuando nos conocimos

estaba aprendiendo a escribir con la mano izquierda y era

diestro.

Él es el penúltimo hijo. Constituye de todas las mentiras

la más grande.

 

Empiezo a ver cosas que se repiten. No puedo evitar

emocionarme.

Este capítulo está dedicado a todas esas zonas que el aire

espiratorio atraviesa.

La humanización de la casa es bastante frecuente en niños muy sensibles.

 

Podría dudarse de una palabra que aparece en la superficie

y flota.

Una palabra gorda que todo el mundo tiene ante los ojos

y es incapaz

de nada.

 

No somos tantos para comer hoy,

En la tierra blanca los niños toman su significado de las

cigüeñas.

Las cigüeñas son las responsables de esta naturaleza

estrellada.

Las familias no son redondas, se basan en un sistema de

castigo y recompensa.

 

¿Qué sucedería si abrieras la puerta de ti hacia mí?

 

Puede tratarse de un familiar que no fue reconocido

con problemas de sueño y piel muy reactiva.

Es evidente el protagonismo que doy a la herida del comedor

y a la aluminosis.

Inmóvil en relación con lo que es volátil al fuego.

La voz rígida constituye un soporte para yo mataré y yo

resucitaré.

Todas las personas tenemos lo que se llama comúnmente

la mala respiración.

En estados precarios el muñequito de cera se sacrifica a

simple vista.

 

Como se ha dicho más arriba:

¿existen métodos para averiguar si una casa o un barreño

pueden ayudarnos sin caer en el error de pedir ayuda?

 

A cada casa le corresponden múltiples tentáculos,

pero a mis padres les da igual.

Nunca se dan besos.

 

 

 

Maite Martí Vallejo

La vida cotidiana arrasa Europa

 

Ril Editores


martes, 26 de noviembre de 2024

PACIENTE UN POEMA DE ROBIN MYERS EN POQUITA FE

 



 

 

 

PACIENTE

 

 

El hospital vive al lado del teatro, comparten

una plaza con una fuente, un carrito nocturno de panchos,

una estatua de una Madonna volcánica con su bebé. Los acomodadores

sales a fumar, los médicos se escapan a fumar, las camisas negras

y las batas blancas se demoran y desaparecen en una nube acre.

La plaza se llena.

Crisis, estreno, pase lo que pase, los cuerpos se forman en

fila. Algunas perlas y sacos. Algunos tuppers. Hombres que duermen

con rigor en un banco de piedra, con el portafolios a un costado.

La comida

forma parte de sus actividades. Papas fritas de bolsa al lado de la

volatería,

sándwiches de queso en bolsas para sándwich, Nescafé, tacos hasta

tarde. Las vueltas que da la gente, la relación con sus propias

extremidades

ociosas. La mayoría se amontona como gansos si están juntos.

Parejas que esperan inquietas, el flash de una cámara, un llanto

irregular

desde un auto estacionado. Las lamparitas de las marquesinas.

Miradas al reloj

para ver qué hora es. La luz límpida de la funeraria de enfrente.

Rosas rojas en mano,

una camilla recostada como un borracho contra una ambulancia.

Y podría seguir. Porque esto sigue. Paso por esta escena casi todos

los días

para ver a alguien que amo. Trato de no llegar con las manos vacías,

y a veces abre la puerta antes de que yo meta la llave.

 

 

 

Robin Myers

Poquita fe

 

Traducción de Ezequiel Zaidenwerg

Prólogo de Claudia González Caparrós

 

Kriller71 Ediciones


lunes, 25 de noviembre de 2024

ME ENTRENÉ PARA HACER COSAS DE PATRICIA GONZÁLEZ LÓPEZ EN OTRO CASO DE INSEGURIDAD

 



 

 

 

Me entrené para hacer cosas

que me hacen mal

y el día que me reí fuerte

me mandaron a educarme

estuve a punto de cortar un futuro hermoso

con el filo de un capricho

traté de olvidar mi humanidad

para poder distinguir

el cuerpo de lo importante

sentí estallar mi equilibrio

como liendre entre las uñas

perdí el peso de las palabras

entre lo jodido y lo absurdo,

le di ventaja al sueño

más que al carácter

pretendía luchar por las leyes

y quebré las propias

regalé mi digestión al enemigo

entregué mis intestinos a

secretos transmitidos por saliva

me enamoré más de lo que permitía mi hígado

me alimenté de la cobardía lógica de los tiernos

y me escapé por la lujuria

cuando mi electro salió hermoso

ya me había adaptado a la sociedad,

había empezado a creer en la tensión

¿dónde está la inseguridad?

no sé si tener más miedo al estado

al último desamor

o al colorante de los jugos en sobre

¿qué es la inseguridad?

¿la policía

el próximo enamoramiento

o yo?

Cuando los perros me muestran la panza

me hacen dudar

qué es ser buena no sé

creo que no quiero serlo

ya pagué mucho

por intentarlo.

 

 

 

Patricia González López

Otro caso de inseguridad

 

Ediciones Liliputienses


sábado, 23 de noviembre de 2024

LUIS FELIPE COMENDADOR NO PASA NADA SI A MÍ NO ME PASA NADA



 

 

 

Dios es toda la vergüenza del hombre.

 

La satisfacción mayor del deber cumplido es que ya no es deber.

 

El mayor escándalo de la existencia de Dios es la justa existencia del Diablo.

 

La Historia olvida al hombre para hablar de los hombres.

 

Al futuro solo se le puede saciar con muertos.

 

La gracia más católica se consigue a hostias.

 

El ocio es un fin depravado con el que conseguir un hombre dócil.

 

Justo donde se acaba el tiempo es donde alumbra la poesía.

 

Sonríele al empedrado de tu calle cada mañana, pues te soporta y no se queja.

 

Los ángeles caídos ya no tienen mal de altura.

 

Cuando digo «nunca», no me gustaría que entendieses «jamás».

 

No es lo mismo construir para la vida que construir para la eternidad. Quien construye para la vida es un hombre bueno para la vida; quien construye para la eternidad es un hombre terrible para cuanto le rodea.

 

La ceniza es la verdad del fuego. Huye de la llama, amigo, que deslumbra y miente.

 

La inspiración es tan extraordinaria porque está fuera de toda voluntad.

 

Los ángeles desfilan al paso de la oca.

 

 

 

Luis Felipe Comendador

No pasa nada si a mí no me pasa nada

 

Editorial Delirio


 

viernes, 22 de noviembre de 2024

CUATRO POEMAS DE INTRAMUROS PRÉCÉDÉ DE DEUX RIVES DE AURORA VÉLEZ

 


 

 

 

III

 

 

 

Días, semanas, la arena de un desierto sin oírte.

Ni titanio, ni acero, ni piedra, no hay nada

más denso, más impenetrable que este muro

de silencio,

de silencio, de cóncavo silencio, de estambres

fecundados, de zurcidos de espera, de cantos

inoculados

en las venas, las nuestras, ahora en dique seco.

Espántame esta muerte,

di algo, aunque sea en sueños.

 

 

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Es curioso

entre los efectos secundarios del virus

nadie habla de la ciclotimia de las emociones

de estas risas adolescentes que termina estallando como

   supernovas

o de la dentellada de pánico azul a que te me mueras.

 

 

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Tiene tiempo la sangre

de tejer su red negruna

en el tiempo de los sueños.

 

Pequeños insectos inoculados avanzan

al hilo de venas y noche

dibujan racimos de enanas rojas visibles

al alba bajo la dermis.

 

Mi brazo izquierdo es una constelación

de nano quejidos, jotas, íes, muy juntas

un archipiélago que luego se desdibuja.

 

El día y su oleaje circundan

la insólita mirada

cuando calla el mundo.

 

Creo que es él, herido, el que

gana mi piel, un faro, un bosque, un hálito…

advertencias mirocondriales

bajo mis uñas.

 

Me araño, luego existo,

el dolor necesario entre sueños

para recordar que esta pesadilla

es.

 

 

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¿Ves este temblor? ¿ves la cañada y los espinos?¿oyes

   cómo se apodera de mi pecho?

Remueve la leche, que hierva, no bebas agua del pozo

   después de comer ciruelas.

De niños explotábamos con la yema de los dedos la viruela

   del calor en el asfalto.

Tina no podía para de reír y se hizo pis encima del burro.

Por la noche el mejor escondite era la cruz de piedra de la

   iglesia.

La mica del suelo infectando la herida.

Nadie quiso comer el cabritillo, porque faltaba aquel con

   el que jugábamos en el corral.

 

¿ves este temblor?

Todo aquel afuera, aquél compás de nidos, pozos y picaduras

   le están marcando aquí dentro a la muerte.

 

 

 

Aurora Vélez

Intramuros précédé de Deux rives

 

Edición bilingue

 

La rumeur libre editions