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viernes, 24 de noviembre de 2023

DOS POEMAS DE FIRAS SULAIMAN EN OLVIDANDO

 




 

 

8

 

Porque estoy aburrido juego con el

cadáver del futuro en la habitación

mal iluminada del lenguaje y porque estoy

más deprimido que el polvo después de una

masacre puedo verme en el

mercado de hortalizas, en mi mano

un ala de lechuga esmeralda una

frase que nadie puede usar

 

 

―――――――――――

 

 

3

 

Prender fuego a tus dedos mojados, ¿no es

sabiduría? Escribir un poema en una

hoja de aire, ¿no es maestría?

Cometer un crimen cuando estás solo,

¿No es valor?

Ser invadido por un pensamiento

de camino a un encuentro,

¿No es…? ¡Ya basta! Versado

lector, ¿no es este un

poema?

 

 

 

Firas Sulaiman

Olvidando

 

Selección y traducción Verónica Aranda

Prólogo Nuria Ruiz de Viñaspre

 

Olifante


martes, 25 de octubre de 2022

UN POEMA DE VERÓNICA ARANDA EN TATUAJE

 

 

 

 

II

 

 

Aquellas madrugadas en los puertos

de tabernas insomnes

y los acordeones del destierro,

no buscaba a los rubios marineros,

aquellos extranjeros de frondosos tatuajes

que se apoyaban en los mostradores,

y su aliento traía el aguardiente

de las naves errantes y los rostros

de mujeres nocturnas y remotas.

 

No buscaba a esos otros marineros

cuyas promesas se difuminaban

en una despedida inexistente

y siempre se marchaban en las tardes de junio

para no regresar. Quedaba el nombre

como único amuleto de su paso,

junto a aquellas palabras que se dicen

cuando sabemos que el exilio acecha,

que podemos quedarnos o escapar.

 

Los tatuajes quemaban y esas noches

yo buscaba el camino de regreso hacía Ítaca,

las colinas de Roma, la ciudad de Kavafis

o un barco que zarpara a la isla de Safo

 

 

 

Verónica Aranda

Tatuaje

 

Hiperión


martes, 5 de julio de 2022

OFICIO DE ESPERAR Y OTOÑO EN TANGER DE VERÓNICA ARANDA EN CAFÉ HAFA

 

 

 

 

OFICIO DE ESPERAR

 

 

 

Oficio de esperar

en esos bares con biombos rojos

donde todas las citas soninciertas

y mienten los amantes

que no asumen el riesgo de ciudades portuarias.

 

Oficio de esperar

y ese suspense,

esa bella ignorancia del origen,

cuando dudamos de los barcos

y el miedo flota en jarras

de cerveza de baja graduación.

 

La noche será larga, perfilada

en las ojeras de las prostitutas.

Y al final el sentido

no estará en esperar, ni en los reproches,

ni en escondernos de los compatriotas.

 

Habrá un abismo y en el centro mirtos.

Y ese hábito oscuro, esa sospecha,

el aislamiento que nos humaniza.

 

 

 

—————————————————

 

 

 

OTOÑO EN TANGER

 

 

 

Era un otoño al límite

mas no desperdiciamos

ninguna madrugada en las tabernas.

Guardábamos silencio

y cenábamos pan con aceitunas

y cerveza caliente.

 

Nunca supe muy bien cómo llegar a ti,

a tu cuerpo espigado

acostumbrado a huir por las cornisas,

a tus días deshechos en esperas

delante de cafés

idealizando siempre los países del norte.

 

Soñaban melodías orientales.

Venían a sentarse las mujeres

del amor mercenario

y contaban historias familiares:

abuelos combatientes en la guerra

que fueron reclutados a millares

por aldeas del Rif.

Visados denegados, contrabando,

Hermanos que se ahogaron en patera.

 

Queda de aquellas noches

más de una verdad apabullante,

anillos pasajeros

y unos besos robados a trasluz.

Amanecer con restos de colonia barata.

 

 

 

Verónica Aranda

Café Hafa

 

El sastre de Apollinaire


lunes, 30 de julio de 2018

LA CASA CON FISURAS UN POEMA DE VERÓNICA ARANDA DE DIBUJAR UNA ISLA




La casa con fisuras


Qué sabes de esta contención,
qué sabes de esta casa y sus fisuras,
de cada objeto o libro que tocaste
las mañanas de estudio,
de tu caligrafía que es memoria.

¿Qué podrías decirme
de mi deseo de muerte
cuando se multiplica en las terrazas
o frente a una dalieda?

Amor, las frases hechas
llegan siempre a deshora.
Hay intervalos
de silencio-arcilla,
posesión que comienza en la no identidad.
Lo que sucede allí
es solo de tu piel hacia el océano.


Verónica Aranda
Dibujar una isla

Reino de Cordelia