Mostrando entradas con la etiqueta Inma Luna. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Inma Luna. Mostrar todas las entradas

martes, 10 de enero de 2023

PAN PARA HOY UN POEMA DE INMA LUNA EN NADA PARA CENAR

 

 

 

 

PAN PARA HOY

 

 

Mis pies en equilibrio.

Ni se sienten ni son.

Con una sed antigua,

espaciada y caliente.

Mastico el pan como si me sobrara.

 

Me deslizo como deslizaría

el filo de un cuchillo.

Las heridas apenas me conmueven.

 

Un día me levanto con las manos vacías.

Otro, le pido a alguien que me cante una nana-

Tengo tantas señales picadas

que se me han hecho costra

y no se me despegan.

 

Soy, a veces, colores.

A ratos, penitencia.

 

 

 

Inma Luna

Nada para cenar

 

Ediciones de Baile de Sol


domingo, 6 de febrero de 2022

UN POEMA DE LA PIEL ES QUIEN MEJOR LO ENTIENDE DE INMA LUNA

 

 

 

 

La piel es quien mejor lo entiende

aunque también el equipaje debajo de los ojos

pero la piel

la piel

y los significados de sus pliegues

lo que en ellos se posa se atesora o se pudre

la piel

la piel palmípeda

violentamente dúctil

en su manera de ignorar mi firmeza

la piel

su inconsistencia

envolviéndolo todo con desgana

la sensibilidad del dedo índice

la incógnita aspereza de los codos

que segura habrán tomado nota de roces con esquinas

y de abrazos

la piel

piel

descamándose en cada diligencia

dejando su impresión en ropas líquidos y cuerpos

ensuciándose incluso a su pesar

alertándome de tu frío

doliéndose

abierta

la piel

en poros

degustadores

absorbentes

que se ciegan y sudan

se erizan vestigiales

a tu tacto

de piel

de piel con piel

la piel

la piel es quien mejor lo entiende

su arruga es solo un modo vagamente sutil

de adelantarnos el espanto.

 

 

 

Inma Luna

La piel es quien mejor lo entiende

 

Ediciones Tigres de Papel


lunes, 31 de mayo de 2021

TRES POEMAS DE EDIFICIO NAUTILUS DE INMA LUNA

 

 

 

 

Olisqueo en el rastro.

Late el carbón debajo de la tierra

aquel que se extraía arrancando la roca

cavando zanjas minas explotando las grietas

hasta partir en dos los cerros.

No hay compasión alguna en el despojo,

Olisqueo en el rastro.

El cerdo sí sabe de la trufa

la rebusca en su hocico

mugriento y exquisito

remueve el barro respirando la greda, se la traga

sin asco.

 

Olisqueo en el rastro.

Yo sé que la poesía sabe de esto

que nos ocurre.

Me enfango en la tarea cruda y descomunal

de exhumar la palabra precisa.

 

 

—————————————————

 

 

Escribo este poema

como si recogiera los pelos de la ducha

como si me estuviese triturando

como si no supiera pronunciar la palabra escondite

o pensara que así

se podría aliviar este dolor de estómago

esta oquedad de aquí, en el centro de todo.

Sabes lo que nos pasa?

que no tenemos ni la menor idea de las cosas

que vamos por ahí pegando tumbos

riéndonos cuando todo nos daña

buscando precipicios por lo que todo esto nos merezca la pena.

 

Ahora

miradme

miradme en el intento de decir algo útil

en el fracaso permanente de mis dedos

que os buscan

a tientas

como si de verdad estuvieseis aquí

como si cada verso fuese alguien que escucha

en vez de posos de café

líquido que se estanca

restos de lagartijas moribundas.

 

Escribo este poema

como si no tuviese nada que contaros

como si me estuviese deshaciendo.

 

 

—————————————————

 

 

La poesía mira al campo

la poeta mira al campo

al campo de trabajo

al campo de exterminio

campo de fresas

campo de minas

o de concentración

al campo de batalla

al campo de cultivo

campo de refugiados

campo

de

tiro

La poesía mira al campo

la poeta

dispara.

 

 

 

Inma Luna

Edificio Nautilus

 

Ediciones de Baile del Sol


domingo, 2 de julio de 2017

TRES POEMAS DE COSAS EXTRAÑAS QUE SIN EMBARGO OCURREN DE INMA LUNA







«reír como el mar ríe, el viento ríe,
sin que la risa suene a vidrios rotos»
Octavio Paz

Postal cariñosa
Me asomo a la baranda
y desde allí
con un sol tan benévolo que parece una tregua,
veo cómo pasean los hombres y mujeres,
veo cómo se besan,
se cogen de la mano
y juegan con sus hijos en la arena,
les enseñan los colores del mar,
el olor que remolcan las olas
y, por un instante,
todo parece tan sencillo...
Como si vivir tan sólo consistiese
en amar y enseñarnos
lo hermoso que puede ser el mundo.



Tanto cable pelado tentándome los sesos
Se ciernen,
y qué puede hacer la madre,
qué puede hacer la hija,
qué puede hacer la novia.
Se ciernen,
amargan todas las almendras,
asolan con el peso bruto,
brutal.
El recorrido de una
dos
tres
flores secas, repentinamente secas,
regadas por un agosto negro,
inadecuado,
que enceguece,
deja
únicamente
la carcasa
vacía,
vaciada,
vacua.
Y
tanto cable pelado tentándome los sesos.



Encías mondas
Un día nos pararemos a pensar qué fue de nuestro sueño
y la tristeza nos molerá de frío
como si nuestras venas albergaran el viento.
Nos sentaremos abatidos y pasarán las horas.
Las encías se quedarán entonces de su desdentamiento,
ya no habrá nada que podamos morder.



Inma Luna – Cosas extrañas que sin embargo ocurren

Ilustra Angelino Carracedo





domingo, 2 de junio de 2013

AFTERHOURS DE UBERTO STABILE O EL AMOR ES LA MEMORIA DE LOS VENCIDOS


Puerta a la izquierda por Pablo Müller





   
Uberto Stabile abre el libro Afterhours con esta definición:
«la necesidad del arte
reside en la inconformidad
de los eternos olvidados,»
Un libro es un territorio sencillo y antiguo, un humilde artefacto de celulosa y tinta que guarda las paredes de algunas casas, que comparte sitio con ácaros y aire, con los insectos y las ganas de vivir. Hoy un libro es un superviviente.
Hacen muy bien la gente de L.U.P.I. los libros: lugares abiertos, donde el aire corre entre las páginas como en su bosque de origen, aire para la vida. Un libro conversación entre palabra y su vacío, el silencio, el ojo de la cerradura de la única puerta a la izquierda.
Luego hay que encontrar palabra con volumen y cuerpo para abrazar el vacío, el silencio, con la arquitectura que aparece cuando el poeta busca más allá de lo que ya está escrito.
Uberto Stabile acomete este trabajo desde la constatación de un sufrimiento «sé mi libro, líbrame de escribirte.” desde el diálogo de la duda y el convencimiento.
VI.
«tal vez no importa como hacer el verso
quizá importe más como retenerlo.»
Uberto practica en este libro la verdad modesta de las minúsculas.
XXVII
«concebido el plan
medidas las fuerzas
y calculadas las posibilidades
la estrategia es siempre
imprevisible.»
Uberto bordea los márgenes de las relaciones que construimos y su lenguaje.
XXXI
«todo crimen
ternura y dolor
toda ley.»
Uberto conoce el olvido como herramienta para vivir.
XXXII
«“todo puede olvidarse”
de todos los placeres
el más grande y desconocido
es éste.»
El necesario olvido cuando se comprende el para qué de los hechos y los sueños.
LIX
«el interior del sueño tenía marcas de haber sido visitado
marcas de otro tiempo que no le era extraño,
no había necesidad de poseer aquel recuerdo
tan solo la certeza de haberlo comprendido.»
En el mundo que nos toca el amor, se repite Uberto, son el relato que no poseen los vencedores.
LXXIX
«el amor – me repito – es la memoria de los vencidos.»
Tras la lectura, devuelto Afterhours a la estantería con los otros libros, se queda abierto al público en horario continuo como nos atina sabiamente Inma Luna en su introducción, para nuevas lecturas que lo conviertan en un nuevo libro.



Afterhours
Uberto Stabile
La Única Puerta a la Izquierda

miércoles, 2 de enero de 2013

EL CÍRCULO DE NEWTON DE INMA LUNA O TANTO AMOR DA PARA VARIAS VIDAS





Olas de diciembre desde la playa de Azkorri por Pablo Müller



«Me atormentan…
cada uno de mis hijos y de mis extrañezas,
de mi tiempo de débito siempre aplazado,
siempre cobarde…»
Inma Luna

El dolor antes de la llegada de los hijos era distinto. El dolor que me llega con ellos es extraño, como si se aplazara en su presencia, suspendido en el plazo entre el aviso de luz del relámpago y el posterior inevitable estruendo del trueno.

Inma Luna ofrece sus poemasvida con la humildad de “algo para hojear en la sala de espera de mi vida”, y tiene el don de abrirme las puertas de mi sala, incluso cuando no la tengo.

«Una vida a estrenar para querer muchísimo,
para querer a quien ya quiero,
querer a quien me quiere
querer a quienes no he sido capaz de querer hasta hoy.»

Al leer esto me llega la extraña convicción de que ya tiene la poeta otra vida y el no poeta otra vida, en el sistema familiar que le pervive. Tanto amor de Inma da para varias vidas.

«Advertencia.
Hay que mirarlo todo y luego, si acaso, descansar.»

«Si somos los culpables de decir lo que sale
por la boca más triste de la casa.»

A veces la boca es la nuestra. Es fácil aceptar la culpa, otras la boca es el otro que queremos y la culpa se nos escapa por los costados de la vergüenza.

«con las ganas ilógicas de quedarnos sentados
enfrente de las penas de los otros
sin saberles llegar,
sin saber qué decir a sus vacíos
que son exactos a los nuestros,
las mismas muertes y los mismos desastres…»

¡El dolor de los otros es el mismo dolor de uno, qué decirles cuándo uno es mudo a su dolor!
Y ese silencio hurga en el dolor enrabietándolo.

Vemos en los otros lo que rechazamos de nosotros y dejamos ver a los que se nos acercan lo que más detestamos de nosotros mismos.
Al menos avisamos de nuestros miedos al propio miedo.
Gracias Inma.


Título:     
EL CÍRCULO DE NEWTON
Autores:     
ISBN-10(13):     
978-84-96687-35-6
Referencia:     
SO-61
Fecha de publicación:     
2007
Número de páginas:     
90
Idioma:     
Español
Editorial:     
Precio:     
10  €