Páginas

viernes, 16 de enero de 2015

EL RUIDO DEL DESHIELO


Ibon Zubiela Martín, fotografía de Noches Poéticas


«Cada noche
bebo lágrimas de mi sangre
para alimentar el equilibrio
de las sombras y los sueños
para acunar esperanzas
y reconciliar al mundo
con mis versos.»
Ibon Zubiela Martín

Al llegar a la casa a la noche al calor del lugar donde se coloca la cuna de los niños recién llegados, después de la jornada donde convivimos con el sufrimiento, el ajeno y el propio, — es el mismo — los poetas lúcidos saben, como Ibon Zubiela Martín, que hay que restaurar el equilibrio que nos permite vivir. Esa sangre y esas lágrimas, esas sombras y esos sueños.

«Poesía y filosofía son métodos para el a-cercamiento. Definir y cercar; en todo caso, elaborar los límites. Y laborar en los límites» dice Chantal Maillard. Ibon Zubiela Martín, en este poema de El ruido del deshielo, define los límites de la vida y la poesía: el equilibrio entre sufrimiento y felicidad, un equilibrio que se aleja de la geometría: es el ejercicio de colocar la mirada en lo esencial de la vida, en la sombra, en el dolor, en la luz y en el amor. Grande Ibon.




2 comentarios:

  1. Ya lo decían por ahí, Ivan Ferreiro: el equilibrio es imposible, pero vivir sin intentarlo también lo es. Gracias por descubrirme nuevas voces. Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias Victor, sabias palabras sobre el equilibrio. Saludos

    ResponderEliminar