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jueves, 5 de abril de 2018

DOS POEMAS DE SIMONE CATTANEO




De todo lo que no sé
quisiera solamente un murmullo,
ahora que he descubierto entre las sábanas
la fórmula para extraer del sudor
el oro ya incrustado.


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Era el goleador aclamado de los torneos de fútbol de la manzana
aunque cobrara pensión de discapacidad por ceguera total,
lograba partir el parabrisas de un coche con las manos sin cortarse,
tenía la piel de los brazos flácida como asfalto líquido
todos los chicos no más altos que esto
lo llamaban Aladino porque resolvía cada problema de la vida con un buen consejo.
Se ha muerto asfixiado con el monóxido de carbono de una estufa de gas,
le ha dejado a su ex-mujer una roulotte verde gastada y montañas de basura grandes como las piscinas municipales.
Cuando yo era niño me dijo por lo bajo que para enamorarse
hacía falta pulir hasta obtener una superficie lisa o
recorrer una autopista en contradirección en agosto.
Por qué en agosto no lo he entendido nunca.


Simone Cattaneo
Peace & Love




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