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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
Cosemos el tiempo a la tristeza, cosemos el humo a las
viejas chimeneas de los barcos, cosemos el recuerdo exacto a las viejas
fotografías. El hilo es la
poesía. La aguja la esperanza.
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
El poeta mira a su alrededor con ojos de palabras, y
de su mirada surgen las preguntas, con la duda y el miedo: el asombro ante la
hermosura del mundo, el asombro ante el horror capaz del mundo.
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
Somos juntos y a la vez, el creador y el asesino, el
conductor del camión con la ayuda humanitaria en el centro de la ruta de la
guerra y el desalmado que entierra las minas antipersonas en las cunetas donde
para a mear.
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
Casi siempre he mirado con palabras. Menos un tiempo
de vacío y pendiente. Al tiempo que perdía hermano, trabajo, estima, perdía la
palabra y la mirada…
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
¿Cómo se observa
con los ojos arrancados?
¿Qué
palabras se pronuncian desdentada la boca por los puñetazos del dolor?
¿Quién
escribe con los muñones cuando te arrancan las manos las explosiones de los
talleres?
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
Soy afortunado. La miseria y la fortuna tienen en común
a su propietario.
Por eso, un golpe de viento lleno de palabras me pone
a salvo, me llega a las playas, pero no desde el mar, sino desde la tierra
borracha y alucinada, y puesto a salvo pago mi debido precio. Voy pagándolo.
Te quiero, Conchi, mi playa.
Abril de
2012
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
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| Bilbao, noche , lluvia y abril por Pablo Müller |
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