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miércoles, 30 de noviembre de 2016

EL ENCUENTRO DE LOS MIEDOS


Donostia, septiembre de 2016 por Pablo Müller



 

Cuando el miedo encuentra a los otros miedos en silencio,

el jefe regional de ventas llora sin consuelo

en el interior del coche parado, en el aparcamiento

a la puerta del Patronato Municipal de Deportes

de Donostia – San Sebastián.

 

Líbranos padre patrón de las lágrimas

frente a los expectantes clientes,

líbranos canalla atención de la inconsistencia

de los mensajes de ánimo,

líbranos padre líquido de esa parte limpia del olvido,

haz que podamos imaginar los mejores recuerdos,

los mejores sonidos que anuncian las actualizaciones

de los mensajes en el teléfono móvil.

 

Líbranos padre miedo de la ingratitud,

incluso de la desmemoria de las gracias,

pues cada silencio es un hueco

que se ofrece a la soledad,

una grieta perfecta para el transcurrir de los insectos,

para la llegada  de la mejor muerte.

 

sábado, 26 de noviembre de 2016

ESQUIRLAS PERSONALES POESÍA DE MIKEL SANZ TIRAPU

 
 
Si el tiempo ya es una derrota, Mikel Sanz Tirapu añade a ésta, una ruptura, acrecentando con ello, las magnitudes de la intemperie. El vértigo al que nos somete, con un estilo austero, visceral y desgarrador, se configura en el eje donde realizar balance vital. Forma y contenido se confunden. La ruptura se transforma en lenguaje, distorsionándose los límites que separan escritura y existencia. A pesar de la pérdida, la memoria confía en el olvido y la nostalgia da paso a la épica para habitar el sueño de lo real, donde “completar la hazaña” de “seguir en pie”.
Inaxio Goldaracena
 
 
 
 
 
CANTO TRIGÉSIMO PRIMERO
 


Intentar/intentar/intentar
 
búsqueda y milagros
 
sacrificio
               como única salida

mensajes incompletos
vinos/esquinas/disculpas

aristas desatadas

la duda
            la duda
                        la duda

vergüenza
                 euforia y el desastre





CANTO CUADRAGÉSIMO TERCERO



Éxodo soy
las horas en astillas

instinto/fugacidad/incertidumbre

desear el descanso/reconocer el corte

volver
volver ahora
transformado en alfileres

premonición                                         el beso
                                                            la caída

                          final e inercia

saberlo todo
                                              y sin embargo





sábado, 19 de noviembre de 2016

ESTO ES UN PRODUCTO HISTÓRICO DE LA INDUSTRIA METALÚRGICA


Acería, octubre 2015 por Pablo Müller



«Guarde el clavo, ahorre. Esto es un producto histórico de la industria metalúrgica.»

Jorge Aulicino

 

Esto, entre las manos,

es un producto histórico de la industria metalúrgica.

Ahora debo planificar la visita anual a la acería.

Allí encuentro los restos imaginados de la memoria laboral

de mi padre, de su hermano, del padre de ambos.

Entre las herramientas

cuyo nombre aprendí antes que los poemas: alicates, gubia,

formón, clavo, tirafondo, destornillador.

Entre los ruidos de metal que eran las músicas de las casas

de la infancia.

Esto es un producto histórico de la industria metalúrgica.

Dejar de labrar la plata blanda y romper el último equilibrio

de la chapa de acero y su pulido. A este ruido dibujar

el tranquilo silencio de los lápices. Romper la lógica versión

de la mina de hierro, subir a la superficie de la lluvia

y mecanizar esta conversación con los metales.

Ahora apuntar los últimos enseres en la libreta

en blanco que abandonó en la marcha padre camino

de nuestros olvidos: producto histórico, el miedo,

producto histórico, el egoísmo, producto solo.

 

domingo, 13 de noviembre de 2016

PASEO DE DOMINGO




Paseo de domingo, octubre de 2016 por Pablo Müller


«La libertad no es tener un buen amo
sino no tener ninguno.»

Gloria Fuertes

 

En este paseo de domingo —nunca ocioso,

nunca impensado— hay varias estaciones juntas,

ahora un verano viejo que no hace por irse

y se arrima a los árboles y escapa de las sombras,

ahora un otoño confundido

sin sitio donde estar en esa duda del que no sabe

si alegrarse o ponerse triste,

ahora un invierno pendenciero y malencarado

que abruma de niebla las copas de los árboles

horas después de su marcha y gotea de pena

el débil sol que nos acompaña,

ahora el ladrido de un perro que aviva

el paso inconsciente del que marcha a la compra

del pan para el almuerzo y descubre

que la estación no es lo importante:

es el eco de la voz del amo tras el silencio

del perro que dice, ven, buen chico, toma

y calla.

 

 

jueves, 10 de noviembre de 2016

ÁNGEL CALLE AQUÍ ESTAMOS PRESENTACIÓN BILBAO




 
CUÁNDO                                      VIÉRNES 11 DE NOVIEMBRE
DÓNDE                                         LOUISE MICHEL LIBURUAK - ELKANO, 27 BILBO
A QUÉ HORA                               A LAS 20 HORAS
 
 
 
Ángel Calle Collado es poeta de los vínculos. Es poeta de la vida como territorio de dignidad, territorio en relación con la tierra como evoca su etimología y no con el de propiedad o patria. Ángel es poeta de muchas voces que tras su presencia se asientan como cultivo en una voz colectiva.
 
 

Receta personal y compartible para el 2016

Agitarse
Acotar las ganas de amargarse el hígado
sustituir la violencia por pimentón de la Vera
Rebozarse el almíbar de los huesos
Ir a fuego rápido y con pocas reservas
reducir inconsistencias
y salivar mares salinos
en su punto corporal

Servir con alegría y dignidad
a partes iguales
Acompañar con un sorbito colectivo
de construyentes rabias

Un poema de Ángel Calle Collado

 
 
 

jueves, 3 de noviembre de 2016

NOVIEMBRE COMIENZA EN JUNIO




Los dibujos de los barcos, noviembre de 2012 por Pablo Müller


 
 
«Ahora sí que te dimos en el talón

La muerte de la que huyas

Correrá acompasadamente a tu lado

 

Buenas noches, Aquíles»

Enrique Lihn

 

A Bosco Allende, en su memoria

 

En el paseo de la noche delante aquella hermosa perra

asustadiza brincaba a la luz vieja de las farolas,

corría tras el tren cansado del último turno, los dos,

encendíamos a la vez los cigarrillos, escuchábamos

la leve historia de un nonato, tú, amigo, llenabas

de razones la intemperie de un dolor ya entonces antiguo,

yo, completaba el accidente de tráfico con el ahogo

de un domingo.

Aquellos años oscuros donde en las clínicas no había

más color que el verde sanitario, y la luz

de los fluorescentes era pálida e invitaba a apagarla

con el remordimiento,

                                           ya entonces nos disponíamos

a andar resueltos hasta la muerte, sin saberlo.
 

Aquella hermosa perra del miedo la tierra le guarda lejos

de ese paseo, a ti te dio tiempo a tener hijos,

a aprender idiomas insospechados,

a pedir el bastón de un cansancio, a levantar la última

cerveza con la mejor sonrisa.

 
Al paseo le han puesto nombre de club de futbol.

El mar sigue teniendo el mismo, compañero.